El misterio, la intriga y el crimen son temas que siempre han gozado de una gran popularidad en la literatura, generando géneros enteros dentro de la novela desde el siglo XIX en adelante. El término novela negra -que debe su nombre a la revista Black Mask, que se empezó a publicar en 1920- es ya un canon con su propio lenguaje, mitos y una legión de fieles seguidores, que cada mes inunda las estanterías de las librerías. Pero por esa misma saturación, separar el grano de la paja se hace muchas veces necesario. Ese motivo es el que nos hace hoy aventurarnos en una tarea complicada: seleccionar las diez mejores novelas negras de este siglo.
Algunos de los clásicos del noir comenzaron su andadura a finales del siglo XX, pero ha sido en éste cuando han gozado de una mayor popularidad. Es el caso de Benjamin Black, el pseudónimo negro de John Banville, con obras como Los lobos de Praga, en el que abandona a su personaje fetiche, el doctor Quirke, para embarcarse en una obra que se une a la novela histórica. También de James Ellroy, eterno enfant terrible del género, que tiene en su bibliografía una obra extrañamente personal dentro de la novela criminal: Mis rincones oscuros, crónica del crimen que acabó con la vida de su madre y su investigación décadas después.
Los lobos de Praga Benjamin Black Christian Stern, un joven alquimista, erudito y ambicioso, llega a Praga en el amargo invierno de 1599 con la intención de hacer fortuna en la corte d… leer más el Sacro Emperador Romano, el excéntrico Rodolfo II, sobrino de Felipe II. La noche de su llegada, borracho y perdido, Christian tropieza en el Callejón del Oro, junto al castillo, con el cuerpo de una joven tendido en la nieve. Vestida de terciopelo y con gorguera de encaje, luce en el pecho un gran medallón de oro y un profundo tajo a lo largo del cuello. leer menos
Mis rincones oscuros James Ellroy Las desgarradoras memorias de la investigación de Ellroy sobre el asesinato de su madre. Mis rincones oscuros es el libro más intimista y el reflejo m… leer más ás oscuro del pasado del autor y de una experiencia que marcaría toda su obra. En junio de 1958, James Ellroy tenía diez años cuando recibió la terrible noticia del asesinato de su madre. El cadáver de Geneva Hilliker fue hallado cubierto de hiedra en una cuneta de las afueras de Los Ángeles, estrangulado con una cuerda y unas medias de nylon y con signos evidentes de violación. El caso no se resolvió, pero la brutal muerte marcó para siempre la vida del autor y fue el germen de toda su obra. En 1994, después de publicar el último volumen del «Cuarteto de los Ángeles», Ellroy decidió descubrir la verdad sobre el crimen. leer menos
El siglo XXI ha traído a las estanterías de los amantes del género a nuevos referentes, cada uno con una personalidad propia. John Connolly y su detective Charlie Parker es un ejemplo, con obras tan celebradas como Todo lo que muere. Otro, de gran éxito comercial, es el francés Pierre Lemaitre, que se adentra en los terrenos del thriller, y cuyo personaje Camille Verhoeven es seguido por sus fans en títulos como Irene.
Todo lo que muere John Connolly John Connolly posee todas las cualidades con las que cualquier editor sueña a la hora de dar a conocer a un autor: una primera novela que conmociona, … leer más una historia terrorífica muy bien tramada, personajes sólidos y complejos (que además aparecerán en otras entregas), una aguda visión de la sociedad y un gran talento y fuste literarios. Éste es, ni más ni menos, el caso de Todo lo que muere y del escritor irlandés Connolly. Que se preparen los adictos a la buena novela policíaca. Una noche, Charlie «Bird» Parker, inspector del Departamento de Policía de Nueva York, discute por enésima vez con su mujer y sale a tomar unas copas; cuando vuelve a casa, se encuentra a su mujer y a su hija de tres años salvajemente asesinadas. Entre los sospechosos figura el propio Parker, pero el crimen no podrá resolverse. Incapaz de superar los sentimientos de culpabilidad y expulsado del cuerpo de policía, Parker se convierte en un hombre atormentado, violento y deseoso de venganza. Cuando su ex jefe le pide ayuda para resolver el caso de una joven desaparecida, Parker acepta y se embarca en una investigación que le llevará hasta el sur de Estados Unidos, donde se las verá con el crimen organizado, con una extraña anciana que dice oír voces de ultratumba y con el «Viajero», un despiadado asesino en serie. leer menos
Irene Pierre Lemaitre «El comandante Camille Verhoeven vive la vida perfecta: esta casado con la maravillosa Irene, con la que espera su primer hijo. Pero su felicidad se r… leer más esquebraja tras un asesinato inusualmente salvaje. Desde que la noticia se hace publica, la prensa parece acecharlo y cada uno de sus movimientos se convierte en noticia de portada. Cuando Verhoeven descubre que el asesino ha matado antes –y que cada uno de sus crímenes parece rendir homenaje a una novela negra clásica–, los periodistas se apresuran a darle un sobrenombre: El Novelista. Quienes pueden ayudar a encontrarlo se suman a la lista de sospechosos: un librero y un profesor universitario expertos en novela negra. La investigación se convierte así en un duelo intelectual, y en una aterradora carrera contra el reloj.» leer menos
La novela negra, como si fuese un género líquido, se ha ido infiltrando en este siglo en todo tipo de latitudes, a la vez que se dejaba mezclar con otros géneros. En su saga protagonizada por el comisario Guido Brunetti, en títulos como Acqua alta, Donna Leon ha convertido a Venecia en un escenario de novela negra reconocible en todo el mundo. Por su parte, Fred Vargas en Tiempos de hielo juega con el género, la historia y el paisaje para crear una de las mejores obras de su reverenciada bibliografía.
Acqua Alta Leon, Donna La arqueóloga norteamericana Brett Lynch, vieja conocida del comisario Guido Brunetti, sufre una agresión en su casa. Dos matones le advierten así que… leer más no se reúna con el doctor Semenzato, director del museo del Palacio Ducal, uno de los más relevantes de la ciudad. Días después, Semenzato aparece muerto en su despacho con la cabeza aplastada por una bella pieza procedente de un yacimiento arqueológico. El melancólico, culto y pragmático comisario creado por Donna Leon se enfrenta a una trama mafiosa que extiende su red de contrabando en el tráfico internacional de arte. Al retirarse el acqua alta, la marea que periódicamente inunda las calles de Venecia, arrastra consigo una suciedad que deja tras de sí un poso de inmundicia y tristeza. La mirada de Brunetti es la de quien sabe que debe nadar en medio de esas aguas, que empapan también el alma de su ciudad. leer menos
Tiempos de hielo Fred Vargas Alice Gauthier, una respetable profesora de matemáticas de sesenta y seis años, aparece muerta en su bañera; todo parece apuntar a un suicidio, pero c… leer más iertos detalles, como un extraño signo trazado en el lugar del suceso, hacen pensar que quizá haya algo más detrás de su muerte, por lo que el caso es derivado al equipo de la Brigada Criminal del comisario Adamsberg. Al poco, una mujer dice haber enviado una carta que la muerta había escrito a un tal Amadée Masfauré…, cuyo padre se habría suicidado dejando un signo similar. Las sospechas se confirman al comprobar que ambas muertes tenían algo más en común: las dos víctimas formaban parte de una trágica expedición a una remota e inexplorada isla de Islandia, diez años antes; Un extraño club de admiradores de Robespierre, viejos rencores familiares, pistas falsas, reminiscencias de antiguos mitos nórdicos; y la imbatible sagacidad de Adamsberg y su brigada son los ingredientes de la magnífica nueva obra de la reina de la novela negra europea. leer menos
El signo de los tiempos ha llevado a los autores de novela negra a incluir en sus tramas y personajes problemas sociales. Petros Márkaris, el gran autor del noir griego, trata en Offshore la corrupción y la evasión fiscal, un caso de su comisario Kostas Jaritos. Don Winslow, por otro lado, ha dedicado en su trilogía de la frontera al mundo del narcotráfico entre EE UU y México, comenzando por su apabullante El poder del perro.
Offshore Petros Márkaris En una Grecia que, misteriosamente, empieza a experimentar una gran recuperación económica, un funcionario de la Secretaría de Estado de Turismo apare… leer más ce muerto en su casa, atado a una silla y con un tiro en la cabeza. Todo apunta a un robo que se torció, pero el comisario Jaritos no descarta que se trate de un ajuste de cuentas. Cuando las indagaciones le llevan a descubrir que la víctima estaba ligada a tráficos ilegales, los agentes detienen a dos inmigrantes que, acusados del asesinato, confiesan que, efectivamente, intentaron perpetrar un robo. El nuevo subdirector general presiona a Jaritos –como siempre, muy escéptico– para que cierre el caso. Y entonces se produce un nuevo asesinato: un famoso armador griego. Después de la «Tetralogía de la Crisis», Márkaris desafía a un comisario Jaritos desbordado por los acontecimientos a resolver varios crímenes investigando por su cuenta y riesgo, poniendo en peligro su propia carrera en la policía, para esclarecer casos que demuestran que los «nuevos» poderes tienen al país atado de pies y manos. leer menos
El poder del perro Don Winslow Década de los setenta: el gobierno de Estados Unidos emprende una lucha sin cuartel contra el narcotráfico en México. Art Keller, un joven agente de l… leer más a DEA de origen hispano, no tarda en obtener resultados y acabar con el patrón local. Un error fatal. El nuevo heredero del imperio del narcotráfico es Adán Barrera, y ambos saben cómo ha llegado a serlo.Encadenados a la misma guerra, se encuentran Nora Hayden, una hermosa prostituta de alto standing adiestrada para hacer enloquecer a los hombres; el padre Parada, un cura católico confidente de esta y empeñado en ayudar al pueblo, y Billy Boy Callan, un chico taciturno, convertido en asesino a sueldo por azar. leer menos
La novela negra española, por último, goza de una buena salud que se refleja en los números de ventas. La saga de Bevilacqua y Chamorro, de Lorenzo Silva, es un ejemplo, con un título clave como El mal de Corcira que ahonda en el pasado en el País Vasco del primero. Y uno de los grandes fenómenos de ventas recientes es Domingo Villar, noir gallego que nos ha presentado a otro de esos personajes carismáticos, el detective Leo Caldas, en libros como La playa de los ahogados.
El mal de Corcira Silva, Lorenzo Un varón de mediana edad aparece desnudo y brutalmente asesinado en una solitaria playa de Formentera. Según varios testimonios recogidos por la Guar… leer más dia Civil de las islas, en días previos se le había visto en compañía de distintos jóvenes en locales de ambiente gay de Ibiza. Podría ser un caso más para el subteniente Bevilacqua, pero en seguida comprenderá que no lo es. Cuando sus jefes le llaman para que se ocupe de la investigación, le hacen saber la peculiaridad del difunto: se trata de un ciudadano vasco condenado en su día por colaboración con ETA. Para tratar de esclarecer su muerte, después de indagar sobre el terreno, tendrá que trasladarse con su equipo a Guipúzcoa, el lugar de residencia del difunto, y una zona que Bevilacqua conoce bien por su implicación casi treinta años atrás en la lucha antiterrorista. Allí deberá vencer la desconfianza del entorno de la víctima y, sobre todo, tendrá que lidiar con sus propios fantasmas del pasado, con lo que hizo y lo que dejó de hacer en una guerra que prefirió abandonar. Unos fantasmas que le conducirán a una incómoda pregunta que como ser humano y como investigador criminal no deja de concernirle: ¿en qué medida nos convertimos en aquello contra lo que luchamos? leer menos
La playa de los ahogados Domingo Villar La marea ha arrastrado el cadáver del pescador Justo Castelo hasta una playa gallega. Podría pensarse que ha muerto ahogado mientras faenaba, si no fu… leer más era porque sus manos están atadas. Sin testigos ni rastro de la embarcación a la que pertenecía el fallecido, el lacónico inspector Leo Caldas, que en lo personal atraviesa días difíciles, trata de esclarecer el crimen sumergiéndose en el ambiente marinero de un pueblo cuyos habitantes se resisten a desvelar sus sospechas y, cuando se deciden a hablar, apuntan en una dirección demasiado insólita. leer menos